La descarbonización de la economía

En Colombia, empresas viveristas como 7 Colinas S.A.S. en Pereira, forman parte de este tipo de esfuerzos encaminados a crear un futuro mejor para la humanidad. 

Poco a poco empiezan a evidenciarse en el mundo modelos de producción que le apuestan a la producción neutra en carbono. Para muchos de los productores y comercializadores viveristas en el país este concepto puede resultar lejano y hasta complejo, razón por la cual bien vale la pena destinar este espacio a ampliar información sobre este necesario esfuerzo en el campo de la sostenibilidad y de la producción limpia. Básicamente una organización, sin importar el sector al que pertenece, logra la neutralidad en carbono (emisiones de gases de efecto invernadero) cuando retira mediante distintos procesos la misma cantidad de gases que emite a la atmósfera durante su operación cotidiana.

Bajo el Acuerdo de Paris con el que se busca hacer frente los mayores desafíos ambientes de la actualidad, en el mundo se deben generar cambios en el estilo de vida y los hábitos de consumo de las personas, y sobre todo, promover nuevos esquemas de producción limpia tanto en los países industrializados como en los que se encuentran en vías de desarrollo para avanzar hacia la denominada “descarbonización de la economía”. La neutralidad de carbono se alcanza cuando se llega a cero, luego de restar de las emisiones producidas, las emisiones absorbidas o compensadas.

En Estados Unidos, la empresa Westerlay Orchids de Carpinteria en California, la cual produce cuatro millones de Phalaenopsis al año, es una de las que recientemente anunció en el boletín HortiBiz los avances de su compromiso de reducción continua de su huella de carbono. Paneles solares, cortinas de energía y un estructurado programa de compensación forman parte de los esfuerzos que le permitieron al cierre del 2021 reducir en un 43% su huella de carbono. Su visión, alcanzar la producción neutra para el 2026, y comparar el uso de fertilizantes, agua, combustibles fósiles y pesticidas con otras empresas productoras de orquídeas, ha sido un primer paso para consolidar este enfoque de producción sostenible.

Con la instalación de 561 celdas solares voltaicas que se prevé generarán 320 kWh por año de electricidad, Westerlay espera cubrir el 100% de todas sus necesidades eléctricas. Con el proyecto de reemplazar cortinas de energía en más de 650 mil pies cuadrados de invernaderos espera ahorrar hasta 55 mil Termias (unidades térmicas) del gas natural requerido para la calefacción de sus invernaderos. Y finalmente, con apoyo financiero directo está contribuyendo con la construcción de la instalación de energía eólica en Tamil Nadu en India, junto con Carbon Footprint, organización encargada de medir y verificar las emisiones de carbono de las empresas y de determinar estrategias para su reducción.

En Colombia, empresas viveristas como 7 Colinas en Pereira, forman parte de este tipo de iniciativas encaminadas a mejorar las deterioradas condiciones del Medio Ambiente. En una superficie de 600 metros cuadrados esta empresa que forma parte de la Red de Afiliados de Colviveros ha empezado a generar energía fotovoltaica y espera alcanzar los 125 kilovatios hora, valor que en el contexto de la producción de plantas vivas, flores frescas y follajes en el país puede considerarse como el más ambicioso esfuerzo hasta el momento.

Atentamente,

Jairo Cadavid Ossa

Presidente

Colviveros

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Vivero Chibcha, un nuevo enfoque

Gabriel Arcila y Vivian Liliana Mosquera han consolidado durante más de tres décadas una de las más importantes operaciones viveristas en el Valle del Cauca. Punto de venta para el consumidor final y servicios de jardinería y paisajismo para las firmas de construcción han sido la esencia de un negocio que hoy considera alternativas propias de producción para atender la creciente demanda del mercado del Suroccidente colombiano.

1. ¿Cómo empezaron y cómo se dio el salto de las materas de Ráquira a la operación como viveristas?

A mediados de los ochenta, Gabriel Arcila padre, para generar el sustento de su familia, abrió un punto de venta principalmente de artesanías y de materas de Ráquira en la galería Alameda de Cali, siendo pionero en la comercialización de estos productos en la ciudad. Entre las ferias artesanales y las vasijas comercializadas surgió el nombre de Artesanías Chibcha, en reconocimiento a los orfebres del altiplano cundiboyancense. Luego vino el momento de la independencia y Gabriel Arcila hijo, para seguir con el legado y el conocimiento adquirido desde su niñez y con muchos deseos de superación, alquila un local y trae de Ráquira alcancías, materas y móviles e inicia su propio negocio. Cuando llega la oportunidad con las plantas se le da el nombre de Vivero Chibcha, un negocio más amplio para responder a una nueva demanda en la ciudad.

El análisis del contexto y las oportunidades de ser más competitivos nos llevan en 1997 a producir nuestras propias plantas ornamentales, principalmente palmas que por la diversidad de tamaños y especies se han convertido en una fortaleza para nuestro Vivero. Para seguir creciendo e innovando en el mercado vamos a incrementar la capacidad actual de producción para atender con nuevos productos las exigencias del mercado.

2. ¿Que oportunidades y qué dificultades han encontrado en el mercado del Valle del Cauca?

Al Valle del Cauca lo caracteriza el color verde. Los vallunos aman la naturaleza y adicionalmente hay un potencial de producción enorme gracias a la diversidad climática, que debemos aprovechar, porque los espacios verdes cobran cada día más importancia y tener plantas hacer parte de la calidad de vida de las personas. Hay una demanda muy importante de plantas ornamentales para decorar y mejorar espacios, y esta es una oportunidad que los viveristas del Valle del Cauca debemos aprovechar. 

En cuanto a las dificultades, consideramos que encontrar personal, operativo o técnico, es uno de los aspectos que hacen más compleja la operación de producción y comercialización de plantas vivas.

3. ¿Cuáles pueden ser los productos más demandados en los próximos años?

Las plantas de follaje, todo lo que sea tropical, plantas con flores y especies forestales seguirán ganando espacio en la ciudad y en el departamento.

4. ¿Cuáles consideran son los retos para el viverismo colombiano?

Aumentar el posicionamiento del sector, porque también generamos empleo y progreso, desarrollar herramientas para que lo apoyen y lo promocionen para que haya un mayor incremento de sus ventas a través de canales nacionales e internacionales.

5. ¿Qué tan interesante fue para ustedes participar en la reciente Misión de Colviveros al viverismo mexicano?

Fue una oportunidad muy interesante para interactuar con otros productores. Tener con

tacto directo con viveristas de otros países, compartir sus experiencias y obtener información de las nuevas tendencias así como de las nuevas tecnologías que ellos vienen implementando es muy enriquecedor. Con los viajes internacionales empieza uno a revisar que debilidades y que fortalezas tiene uno frente a otros mercados, a recolectar información sobre proveedores y sobre todo en qué podemos mejorar para ir avanzando en nuestra empresa y contribuir a la profesionalización del sector.

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